Actualmente, es posible conocer cuántos kilómetros recorre un jugador, cuántos pases realiza, cuántas veces tira a portería, etc. Uno de los sistemas que se utilizan (y que fue adoptado en la UEFA Euro 2008) es el TRACAB, una tecnología sueca de procesamiento de imágenes que fue inicialmente utilizada para fines militares como el guiado de misiles. El sistema TRACAB permite identificar, en tiempo real, todos los objetos que se mueven en un estadio deportivo. Para el fútbol, se utilizan de cuatro a ocho pares de cámaras instaladas alrededor del terreno de juego y controladas por un grupo de computadoras. El flujo de vídeo capturado por las cámaras es analizado por el sistema de seguimiento de imágenes.

El proceso de captura, procesado y salida se lleva a cabo en tiempo real, es decir, más rápido que 1/25 de segundo. El resultado del análisis es un feed de datos con coordenadas X, Y y Z, así como la velocidad y la aceleración de todos los objetos. La precisión de las mediciones es inferior a un decímetro. El sistema está totalmente automatizado, pero cuenta con un operador para el seguimiento. Una de las mayores ventajas es que el sistema no utiliza transmisores o cualquier otro tipo de dispositivo en los jugadores o en el balón. El sistema no interfiere en modo alguno en el juego.

El Índice Castrol de la FIFA utiliza este sistema y permite comparar jugadores según algunas características clave. También lo utilizan en Suecia (Sportbladet Zoom) para transmitir partidos de fútbol en versión virtual basados en la transmisión en directo, con todas las estadísticas de los jugadores.